Cada año, el sábado siguiente a la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, la Iglesia celebra la fiesta del Sagrado Corazón de María. Una oportunidad para mirar a la Virgen no solo como Madre y discípula, sino como corazón vivo que acogió, guardó y ofreció a Cristo.
¿Qué significa esta devoción?
El Corazón de María no es solo símbolo de sentimientos. Es reflejo del amor de Dios, de la disponibilidad total, de la ternura fuerte que acompaña incluso en la cruz. En su corazón caben nuestras heridas, nuestras súplicas, nuestras alegrías más profundas.
Ella no se reservó nada: cada gesto, cada silencio, cada lágrima y cada alabanza de María estuvieron marcados por la fe. En su Corazón Inmaculado, custodia con reverencia el Corazón de su Hijo, y nos invita a hacer lo mismo.
¿Cómo vivir esta devoción?
- Confiando nuestras intenciones personales y familiares a su intercesión.
- Consagrándonos a su Corazón, como hijos que se acogen a su guía.
- Aprendiendo de su estilo: guardar, contemplar, responder con fe.
Celebra con nosotros
Este 28 de junio, nos unimos como comunidad para honrar su Corazón.
Descárgate aquí el documento completo de Devoción y Consagración al Inmaculado Corazón de María.
Devoción y Consagración al Sagrado Corazón de María
Porque cuando nos acercamos a María, su Corazón nos lleva directamente al de Jesús.
📖 “María guardaba todas estas cosas en su corazón.” — Lc 2,19